Una Guía de Seguro Para ONGs que Operan en Entornos Violentos
Los corredores y las aseguradoras deben trabajar con usted para garantizar que consigue las pólizas adecuadas para su organización. Sin embargo, a veces pueden intentar empujar a los clientes hacia una póliza concreta sin tener en cuenta si realmente satisface sus necesidades. Por lo tanto, es vital que las organizaciones sepan exactamente qué tipo de cobertura necesitan, y que pidan presupuestos que se ajusten a esos requisitos. Si su corredor o asegurador no está dispuesto a ser flexible o no es capaz de entender las necesidades de seguro de su organización, debe buscar proveedores alternativos. Utilizar el corredor y aseguradora más adecuados es imprescindible. Es muy aconsejable buscar empresas especializadas en su sector; pida recomendaciones a organizaciones similares.
Si encuentra una póliza que proporciona la mayor parte de la cobertura que necesita, pero no toda, explíquelo al corredor o a la aseguradora y pregúnteles si pueden proporcionarle endosos adicionales para cubrir las lagunas. Endosos adicionales útiles pueden referirse, por ejemplo, a los tipos de personas aseguradas, a la ampliación de la cobertura geográfica, a la inclusión de condiciones médicas preexistentes o a la autorización para viajar contra las recomendaciones de viaje del gobierno.
Por lo general, se pedirá a las organizaciones que rellenen un formulario y proporcionen información complementaria. La información solicitada puede incluir, por ejemplo, detalles de la empresa, el nivel del seguro requerido, las actividades de la empresa, los riesgos probables, el número de personal, los hábitos de viaje, los destinos de los viajes, las reclamaciones e incidentes anteriores y registros de activos. Además de comprender sus necesidades, este proceso forma parte de la metodología que utilizan los aseguradores usan para evaluar la exposición de su organización a los riesgos, (y, en última instancia, la probabilidad de reclamar la póliza). Las organizaciones están obligadas a facilitar esta información a sus corredores y aseguradoras de forma clara y accesible y sin incurrir en falsas declaraciones. Si las organizaciones no lo hacen, puede calificarse (en el Reino Unido) como un “incumplimiento del deber de presentación justa” en virtud de la Ley de Seguros de 2015, lo que permite la aseguradora anular el contrato, rechazar todas las reclamaciones y no devolver ninguna de las primas pagadas.
No es infrecuente que las organizaciones ofrezcan pólizas más amplias al personal que viaja o al personal internacional con sede en el extranjero que al personal nacional. Esto es en parte debido a la disponibilidad de seguros adecuados en distintos países, pero también es un reflejo de la relativa falta de medidas de mitigación establecidas para el personal nacional, a pesar de la creciente práctica de transferir el riesgo de los agentes internacionales a los nacionales. Esto constituye un enfoque absurdo y discriminatorio de la gestión de riesgos, ya que el personal nacional suele estar mucho más expuesto a las amenazas a la seguridad que sus compañeros internacionales. De los 3.114 trabajadores humanitarios que han muerto, han resultado heridos o han sido secuestrados en los 10 años transcurridos hasta 2017, sólo el 14% (439) era personal internacional, según la base de datos de seguridad de los trabajadores humanitarios. Los aseguradores y corredores específicos del sector están empezando a comprender y responder a esta dinámica desarrollando y ofreciendo pólizas globales. Por ejemplo, Ambrelia y Allianz Worldwide Care han diseñado la gama de seguros ‘ONG Care’, tomando este requisito en cuenta. Una opción alternativa para las organizaciones es establecer unas normas mínimas de seguro para los programas de los países y auto asegurarse cuando las pólizas en el país no alcanzan esas normas.
Durante los últimos 10 años, la mayoría de las grandes aseguradores han empezado a proporcionar a los clientes acceso a los portales de riesgo como parte de sus pólizas de viaje, accidentes personales, secuestros o soluciones de crisis. Aunque la calidad y el grado detalle de la información que esta proporcionada varían considerablemente, estos portales en línea suelen incluir, por ejemplo. perfiles de países y ciudades, calificaciones de riesgo, información sanitaria, informes de protección y seguridad, orientaciones de etiqueta comercial y social, datos de contacto embajadas y avisos gubernamentales sobre viajes. Estos portales pueden utilizarse para impulsar el sistema de nivel de amenaza de una organización o informar de las evaluaciones de riesgos de los viajes, y como están disponibles para todos los cubiertos por la póliza, los individuos pueden investigar los destinos, proporcionando un mecanismo excelente para apoyar los procesos de consentimiento informado de una organización.
Una vez que las organizaciones tienen las pólizas adecuadas, éstas deben ser socializadas con los asegurados. Esto debe ir más allá de la simple comunicación al personal que están cubiertos o de la distribución del documento de resumen de la cobertura en un correo electrónico. Como ya se ha dicho, las pólizas suelen ser documentos largos y complejos, llenos de jerga y un de múltiples inclusiones, exclusiones, endosos y condiciones. Esto significa que las organizaciones deben traducir la póliza y cobertura en un lenguaje claro. Las organizaciones deben elaborar documentos de orientación breves y sencillos (idealmente con algunos ejemplos) y organizar sesiones de socialización en las que los asegurados puedan hacer preguntas para comprender mejor lo que está cubierto y lo que no. Hay que tener en cuenta que esto debe excluir la solución de crisis, y las pólizas de secuestro, rescate y extorsión.